Aunque no sea el uso más frecuente que le damos a nuestro teléfono, hay ocasiones en las que podemos beneficiarnos enormemente de utilizar nuestro iPhone como si fuera un Pen Drive. Una función que nos ofrece una alternativa para sacar partido al espacio disponible en nuestro dispositivo, especialmente cuando otras opciones, como el almacenamiento en la nube, no están disponibles.
Un almacenamiento que no depende de la nube
Nuestro iPhone puede convertirse muy fácilmente en una opción realmente interesante cuando necesitamos trasladar archivos grandes y no contamos con acceso a internet o preferimos una opción más directa que el almacenamiento en la nube. La transferencia de archivos puede realizarse de forma sencilla y eficiente utilizando AirDrop siempre que estemos transfiriendo desde un Mac, un iPad u otro iPhone.
Una opción realmente cómoda si seleccionamos como ubicación "En mi iPhone" dentro de la app Archivos. Al hacerlo así, la transferencia por AirDrop, incluso por cable, guarda el contenido directamente en almacenamiento interno de nuestro iPhone, evitando así el consumo innecesario de datos móviles y también de batería que supondría pasarlos a la nube. ¿No aparece esta opción? Abramos la app Archivos, entremos en la pestaña Explorar, toquemos Editar en la parte superior y activemos En mi iPhone.
Si AirDrop no es una opción, seguimos teniendo maneras de usar nuestro iPhone como un pendrive. Requiere algunos pasos más, pero es casi igual de simple. La clave aquí está en la utilización de aplicaciones de gestión de archivos de terceros, como Documents, Files Go o iFiles. Estas aplicaciones, combinadas con iTunes en Windows o la app Finder en el Mac y una conexión física a través de un cable, nos permiten sincronizar y gestionar archivos entre nuestro iPhone y un ordenador de manera eficiente.
Si estamos en un PC con Windows, el proceso comienza con la selección de una app de gestión de archivos adecuada y la instalación de iTunes. Una vez conectado el iPhone al PC y establecida la confianza entre ambos dispositivos —tocando Confiar cuando se nos pregunte—, podemos sincronizar y transferir archivos utilizando la sección de Archivos de iTunes. Basta con que arrastremos los archivos deseados a la aplicación, seleccionada en la barra lateral, y esperemos a que se complete la transferencia, o viceversa.
Aunque usar nuestro iPhone como almacenamiento externo puede no ser lo primero que nos viene a la mente, esta función puede resultar extremadamente útil en ciertas circunstancias. Ya sea que nos encontremos sin acceso a internet o necesitemos trasladar una cantidad significativa de datos de manera rápida y segura, nuestro iPhone nos ofrece una solución práctica y eficiente.
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