Tim Cook, el discreto CEO de Apple, nos ofreció una mirada poco común a su vida personal y profesional en una reciente entrevista para el podcast Table Manners, de Jessie y Lennie Ware, durante su última visita a Londres estas pasadas navidades. Estos son los detalles íntimos que nos compartió.
Como podemos escuchar en este episodio disponible en Apple Podcasts, durante casi una hora, Cook habló de su infancia en Alabama, su rutina diaria, su filosofía sobre el retiro, su amor por el chocolate negro y sus comidas favoritas, dejando entrever el lado humano detrás de una de las figuras más influyentes del mundo tecnológico.
Un retiro poco convencional
Cuando se le preguntó si alguna vez piensa en retirarse, Cook fue claro: “Sí, pero no en la definición tradicional. No me veo en casa sin hacer nada, sin estar intelectualmente estimulado, pensando en cómo mañana puede ser mejor que hoy”. También confesó que desde joven ha sentido la necesidad de mantenerse activo: “Trabajaba cuando tenía 11 o 12 años… Siempre quieres que te empujen un poco, sentirte incómodo… Creo que siempre querré que me empujen.”
Madrugador y amante del orden
Para Cook, el día empieza muy temprano. Se levanta a las 5 de la mañana, a veces incluso antes. "Es el momento del día que más puedo controlar. Después, durante el día, todo se vuelve menos predecible… Así que me encanta esa parte del día en la que puedo, de alguna manera, desconectar del mundo, centrarme en algunas cosas críticas y simplemente estar en silencio por un rato.”
Sus mañanas comienzan con café y un bol de cereales con anacardos rico en proteínas del Whole Foods con leche de almendra sin azúcar. Y, por supuesto, revisando correos: “Recibo unos 500 o 600 al día. En días extraordinarios, muchos más”. La mayoría de ellos, dice, son de empleados y clientes.
Una infancia definida por el trabajo
La infancia de Cook en Alabama estuvo profundamente ligada al trabajo y la disciplina. Creció con "el trabajo como centro”, recuerda. A los 11 años tenía una ruta de entrega de periódicos y, a los 14, ya trabajaba en Tastee-Freez, una cadena de comida rápida.
"Primero repartía periódicos… y luego ascendí a voltear hamburguesas…" dice con gracia el CEO de Apple que añade que "ganaba 1,10 dólares la hora, menos del salario mínimo, pero era legal en ese momento". Sus padres le inculcaron el valor del trabajo duro, algo que, según él, ha llevado consigo toda su vida.
El no tan "Cook" de la cocina
A pesar de su apellido, Tim Cook no cocina: “Caffè Macs es increíble. Almuerzo allí y suelo llevarme la cena a casa durante la semana”. Prefiere el pescado, de hecho, su última comida (una pregunta que ya es tradición establecida en Table Manners) sería un hamachi crudo con jalapeño, un branzino como plato principal acompañado de brócoli y, de postre, cualquier cosa de chocolate, especialmente negro, su debilidad.
Además, confesó su amor por el vino blanco, en especial el Chardonnay de Kistler, y mencionó uno de sus restaurantes favoritos, Ethel’s Fancy en Palo Alto, donde disfruta del pulpo.
Tim Cook también reveló que su plato favorito de la infancia era el pollo frito. Así como una curiosidad poco conocida sobre el Apple Park: el campus (que antes solía ser un huerto) tiene árboles frutales, y las manzanas y cerezas que producen se recolectan para hacer mermeladas. De hecho, durante la entrevista, compartió una mermelada de manzana especiada hecha con frutas del Apple Park con los presentes.
Los viernes en casa y aventurero en su tiempo libre
Al parecer, Cook trabaja desde el Apple Park cuatro días a la semana, pero los viernes prefiere hacerlo desde casa. ¿La razón? “No hay nadie en la oficina, y es deprimente cuando no hay nadie allí”, comentó. Esto es porque Apple mantiene un modelo de trabajo híbrido que permite a los empleados trabajar desde casa hasta dos días a la semana.
Y Cuando no está en su oficina en Apple Park, a Cook le gusta caminar y visitar parques nacionales. Recientemente, dice que exploró cuevas en Eslovenia.
Después de hablar sobre el Apple Intelligence (que hace poco nos defendía su llegada tardía) y explicar qué son los Genmoji a sus entrevistadoras, ellas preguntaron a Cook si tenía un Genmoji personalizado. Y fiel a su estilo diplomático, respondió con un guiño navideño: “Estaba trabajando en uno ayer. Me encanta la Navidad, y Londres es la ciudad navideña por excelencia. Así que estaba pensando en cómo se vería el Big Ben con un árbol enfrente”.
Pero más allá de este comentario festivo, no hubo ningún anuncio ni pista sobre nuevos productos. Eso sí, Cook dejó caer su habitual frase “Tenemos muchas cosas en camino” para mantener el suspense. Y seguro que es verdad. Porque, si algo queda claro, es que Tim Cook es un hombre con una pasión inquebrantable por seguir adelante avanzando, aunque eso implique empezar el día con que el sol.
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