Después del invierno, como cada año, llega la primavera. En el hemisferio norte este cambio ocurre alrededor del 20 o 21 de marzo. Un evento astronómico al que llamamos equinoccio de primavera y que tiene varias implicaciones tanto a nivel cultural como en nuestro día a día.
Hace más de unos asombrosos 3.000 años que la humanidad empezó a celebrar el equinoccio de primavera. Siempre ha sido un momento clave con importantes implicaciones, principalmente en la agricultura, el clima y la próxima llegada del verano. Así que medir con exactitud dicho momento era extremadamente importante para el éxito de las cosechas y para asegurar la supervivencia de la comunidad. Y a día de hoy, aunque puede pasar más desapercibido, sigue siendo un evento remarcable.
Qué es el equinoccio
El término equinoccio proviene del latín "aequinoctium", que significa "noche igual" y es un evento astronómico que ocurre dos veces al año, en primavera y en otoño, cuando el día y la noche tienen una duración igual en todo el planeta. Esto se debe a que, en ese momento, la Tierra se encuentra en una posición en la que —independientemente de por dónde pasa la línea del ecuador— su eje de rotación es perpendicular a los rayos del sol y, por lo tanto, la luz solar se distribuye de manera uniforme en todo el planeta.
Durante el equinoccio de primavera, que suele ocurrir alrededor del 20 o 21 de marzo, el hemisferio norte comienza a inclinarse hacia el sol, lo que da lugar al inicio de la primavera en esa parte del mundo. Por otro lado, durante el equinoccio de otoño, que suele ocurrir alrededor del 22 o 23 de septiembre, el hemisferio norte comienza a alejarse del sol, lo que da lugar al inicio del otoño en esa parte del mundo.
En el hemisferio sur, las fechas son las mismas, pero los equinoccios se invierten. Así como el verano y el invierno se complementan entre la mitad superior y la inferior del globo, los equinoccios también. En marzo empieza el otoño en el hemisferio sur, mientras que es en septiembre cuando empieza la primavera.
Cuándo empieza la primavera
En el hemisferio norte, el equinoccio de primavera tendrá lugar hoy mismo, 20 de marzo, a las 22:24, hora peninsular de España. Los días llevan alargándose desde el solsticio de invierno —la noche más larga del año—, y hoy finalmente habrá la misma luz que oscuridad. A partir de este momento, los días irán aumentando a un ritmo de 3 minutos cada 24 horas hasta el solsticio de verano en junio, cuando el ritmo se invertirá.
Alrededor del mundo, estas son las horas a las que llegará, oficialmente, la primavera.
En America:
- En San Francisco empezará a las 14:24.
- En México y en Denver empezará a las 15:24.
- En Colombia y en Chicago empezará a las 16:24.
- En Bolivia y Nueva York empezará a las 17:24.
- En Argentina empezará a las 18:24.
En Europa:
- En Londres y en Senegal empezará a las 21:24.
- En París y en Nigeria empezará a las 22:24.
- En Finlandia y en Egipto empezará a las 23:24.
En Asia, la primavera empezará mañana día 21 de marzo:
- En Turquía empezará a las 00:24.
- En Emiratos Árabes Unidos empezará a las 01:24.
- En India empezará a las 02:54.
- En Tailandia y Vietnam empezará a las 04:24.
- En China y Singapur empezará a las 05:24.
- En Corea del Sur y Japón empezará a las 06:24.
Cambio de hora
Paralelamente, y con la intención de sacar el máximo partido a la luz solar, pronto haremos el cambio de hora en Europa. El cambio de hora se realizará en la madrugada del 25 al 26 de marzo en España, momento en el que los relojes deberán adelantarse de las 2:00 a las 3:00 horas directamente.
Con ello, pasaremos del CET, el Central European Time, al CEST, el Central European Summer Time, al que también llamamos la hora de verano. Un cambio que volveremos a invertir a principios de otoño.
Ya lo veamos desde la perspectiva analítica de los números o desde la más poética del primer verde, la llegada de la primavera es un momento de transición importante en el ciclo natural de la Tierra. Uno que marca el comienzo de una nueva temporada llena de vida y color.
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