La ola coreana o hallyu parece que se ha apoderado de buena parte del mundo del entretenimiento, y la última joya de esta corona es King the Land, el drama romántico que ha capturado la atención internacional y se ha convertido en el número uno en Netflix. Pero, ¿qué hace que esta serie sea tan especial y distinguible de las demás?
Ha disfrutado siete semanas consecutivas de estar en el Top 10 de Netflix y ha acumulado más de 65 millones de horas de visualización en sus primeros días. Este K-drama, que ayer domingo día 6 de agosto estrenó el esperado último capítulo de la temporada, parece ha tenido un éxito mucho más abrumador que otras series coreanas con un argumento similar, como Propuesta laboral o ¿Qué Le Ocurre a La Secretaria Kim?. Y la razón es sencilla: King the Land tiene una historia muy bien tejida, personajes memorables, una buena producción y una sorprendente ternura y habilidad de llegar a los corazónes.
De qué va 'King the Land'?
Todo comienza en 2015, con Cheon Sa-rang (Im Yoon-ah), una joven que, desde que de pequeña pasó el mejor día de su vida en un hotel, sueña con convertirse en conserje de hotel y traer la máxima felicidad a todos los clientes que se crucen en su camino. A pesar de no haber ido a la universidad, su brillante actitud y aptitud natural la llevan a trabajar en el lujoso King Hotel.
Enfrentando varios desafíos en el trabajo, incluyendo una buena tanda de envidia de los compañeros, en poco tiempo pasa de lo más bajo a ser el "Mejor Talento" del hotel durante dos años consecutivos. Lo que la lleva al puesto más codiciado de entre los conserjes y a trabajar cerca del Director Gerente, Goo Won (Lee Jun-ho), el heredero del grupo King que se encuentra en medio de una batalla sucesoria con su hermanastra mayor, Goo Hwa-ran.
Arrogante, intransigente y con un gran desprecio por las "falsas sonrisas" de los empleados, lo que comienza como una enemistad profesional entre Goo Won y Cheon Sa-rang se transforma en un precioso romance a medida que avanzan los episodios.
¿A qué se debe el éxito de 'King the Land'?
Las razones del atractivo de King the Land son múltiples. Se trata de una historia auténtica y conmovedora. Pero todo empieza con sus protagonistas (respaldados por geniales y humorísticos secundarios). Sa-rang es una mujer moderna que sabe lo que quiere. Y, a diferencia de los demás empleados, ella es sincera. Cándida y honestamente desea servir a cada uno de los huéspedes del hotel como si fueran un rey, lo que le trae varios desafíos, pero también grandes recompensas. Es un personaje encantador con el que fácilmente simpatizas y al que quieres apoyar.
Por su parte, Goo Won, con sus elegantes trajes y su vida acomodada, no es el clásico rico arrogante y distante. Bueno sí, pero por poco. Rápidamente se convierte en alguien que aprende de sus errores y muestra bondad con los que le rodean, un personaje digno de ser real. Además, siendo una figura importante, usa sus recursos y su rango de jefe para mejorar las cosas de verdad. Completamente abierto a las sugerencias, casi inconscientes, de Sa-rang (temas básicos y evidentes a los que a veces los ejecutivos no prestan atención), convierte el hotel King the Land en el mejor lugar para trabajar.
Con una gran química en pantalla, palpable en cada escena, ambos son personajes bien interpretados, profundos, divertidos, encantadores y, sobre todo, humanos. El respeto y la admiración mutua entre estos protagonistas ofrecen una perspectiva refrescante, cómica y emotiva, y su dinámica mantiene al público encantado mientras los vemos navegar por un equilibrio entre la vida personal y profesional.
El argumento de este K-drama es la historia de siempre. Pero solo en apariencia. Más allá de un romance típico, la serie nos ofrece un curioso vistazo al fascinante funcionamiento del mundo de la hotelería, además de un importante reflejo de la cultura coreana. Preciosas salas, excelentes modales, lujo y elegancia por todas partes requieren detrás de escena un gran rigor, práctica y profesionalidad que esta King the Land ilustra con sinceridad y destreza.
Una importante calidad de producción y un genial equilibrio entre el humor (como Won buscando en Google "cómo salir") y el realismo (destacando las dificultades financieras y el cansancio de los trabajos de servicio) mantiene la narrativa atractiva y resulta en una historia familiar pero refrescante. Colorida y luminosa, King the Land es una serie que destila elegancia, bondad, buena voluntad, dulzura y nobleza.
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